Historia del Reiki
Historia del Reiki
Mikao Usui nació el 15 de agosto de 1865, en Yago Gun prefectura de Gifu. Se dice que fue una persona motivada siempre por la ayuda a sus congéneres y un estudioso de los Sutras Budistas. Se destacó por poseer un alto nivel de espiritualidad, y una marcada inquietud en la búsqueda de la información sobre los caminos recorridos por los grandes Maestros, y por lo que ellos lograban hacer en la sanación de las enfermedades físicas, mentales y espirituales.
Viaja a India y al Tíbet donde continua su búsqueda en los monasterios Budistas, estudiando los Sutras Budistas y Tibetanos, fue así como llego a estudiar más de 300 símbolos que utilizaban Jesús, Buda y los avatares para la sanación.
Usui regresa a Japón y siguió investigando tenazmente y visitando monasterios y por fin en uno de ellos creyó haber encontrado la respuesta que buscaba en un manuscrito en el que un discípulo de Buda constataba la existencia de unos símbolos y procedimientos que Buda los había utilizado en sus curaciones, similares a las de Jesús, y también se revelaba la forma de trasmitir esas facultades a otras personas.
Usui comunico el hallazgo al Abat del monasterio, que era un misionero Zen, y decidieron que debía aislarse en meditación, ayuno y oración en la montaña
sagrada de Kurama, a 25 kilómetros de Kioto durante tres semanas; una vez allí coloco veintiuna piedra en el suelo para medir el transcurso de los días quitando una cada día. Así pasaron los primeros veinte días sin que ocurriera nada significativo hasta que al amanecer del día veintiuno vio acercarse una esfera luminosa que se dirigía hacia él, y aunque su primera reacción fue huir decidió aceptar la realidad tal como se presentara; entonces la luz le toco en el tope de su cabeza y vio en burbujas de luz los símbolos Reiki, además se le informó sobre la forma de utilizarlos para activar la Energía Universal sanadora.
Así tuvo lugar la primera sintonización de Reiki, que fue la de Mikao Usui al que le fueron revelados de esta forma los métodos de esta técnica ancestral.
A partir de allí su misión sería la de dar a conocer otra vez a la humanidad la enseñanza que se creía perdida, creando así lo que hoy conocemos como sistema de Sanación Usui de Reiki.
En los años posteriores Usui se dedicó a impartir el Reiki a las personas más desfavorecidas entre los mendigos de Kioto y se produjeron muchas curaciones que les devolvían la integridad física para trabajar y mantener a sus familias. Pero más tarde observó que muchos de ellos volvían a la mendicidad y al preguntarles por qué lo hacían, le contestaban que les resultaba más difícil volver a trabajar para ganarse la vida y que por ello preferían mendigar y no tener responsabilidades.
Al analizar las razones de este desinterés en ganarse la vida honradamente, comprendió que solo había curado el cuerpo físico pero no la parte espiritual, ya que no había sabido enseñarles la gratitud y el sentido de responsabilidad de su propia existencia.
A partir de este momento Usui Sensei dedicó su vida a difundir el Reiki a sus discípulos, tal como lo había recibido, luego ellos lo esparcieron por todo el mundo.
En septiembre de 1923, un devastador terremoto sacudió a la ciudad de Tokio. Miles murieron y desaparecieron quedando muchos heridos. Usui Sensei y sus estudiantes llevan el Reiki a la ciudad devastada y aplican sus conocimientos sanadores a las víctimas y sobrevivientes. Muy rápido su clínica se volvió pequeña, así que en febrero de 1925 construyó una nueva en las afueras de Tokio, en Nagano. Recibió invitaciones para enseñar y dar tratamientos en muchos lugares
de Japón. Tras visitar muchos lugares, como Cure, Hiroshima y Saga el 9 de marzo de 1926, murió inesperadamente en una fonda en Fukuyama.
Los sucesores de Usui Sensei: Hayashi y Takata.
Chujiro Hayashi recibió las enseñanzas y las sintonizaciones directamente de Usui, convirtiéndose en 1925 en Maestro Reiki.
La labor sucesora fue desarrollada por Hayashi, dándose cuenta de la importancia de conservar el método y los registros de las curaciones medicas, funda un centro clínico de Reiki en Tokio, donde los enfermos recibían las curaciones y aprendían la técnica. En 1935 acudió a esta clínica buscando curación la señora Hawayo Takata, la cual estaba enferma de un tumor, ya que cuando iba a ser intervenida escucho hablar de Reiki y desistió de la operación Takata recibió tratamiento de Reiki por varios meses hasta quedar completamente curada, solicitando a Hayashi que la aceptara como alumna; pero este se mostraba reticente porque Takata era hawaiana y Hayashi no quería que el Reiki saliera de Japón; al final ante la insistencia de Takata, accedió a impartirle las enseñanzas y las sintonizaciones Reiki uno y dos durante 1936 y 1937, periodo que permaneció en Japón practicando e impartiendo Reiki.
A finales de 1937 regresa a Hawái a aplicar lo aprendido. Así lo hizo y el Reiki fue aceptado rápidamente entre la población, por lo que el doctor Hayashi y su hija llegaron a Hawái en 1938 y permanecieron varios meses enseñando y practicando en compañía de la señora Takata e igualmente le impartió las iniciaciones correspondientes al tercer nivel y la Maestría, designándola como su sucesora, convirtiéndose en la tercera Gran Maestra de Reiki. Takata se dedicó a extender el Reiki por Estados Unidos y Canadá habiendo formado a 22 maestros antes de su muerte en 1980. La línea descendiente de Takata la ostentan su nieta, Phillips Lei Furumoto, y la doctora Webber Ray, que en principio trabajaron juntas y luego se separaron fundando Phillips Furumoto la asociación denominada Reiki Aliance, y Webber, la AIRA (American Internacional Reiki).